FAUSTO CRIOLLO (1979)
Luis Saslavsky
Protagonizada por:
Claudio García Satur
María Del Carmen Valenzuela
Pedro Quartucci
Luis Vehil
Eva Franco
Estudios: Valentino Cinematográfica (Prod.)
País: Argentina
Estreno: 25 de Octubre de 1979
Duración: 90'
Género: Fantasia
El relato se inicia con el encuentro entre el gaucho Laguna y Anastasio, el Pollo. Éste le cuenta su experiencia reciente en Buenos Aires, al concurrir al teatro Colón donde se desarrollaba la obra del Fausto de Goethe. La buenas intenciones de los vestuaristas confunden ya que los carteles que anuncian la obra est??n fechados en 1866 y los vestidos y trajes del público que asiste al teatro, son propios de la época colonial, como aquellas estampas típicas de algún póster de la revista Billiken, con el pueblo reunido junto al Cabildo en vísperas de Mayo.
La representación teatral, respetuosa y lograda, se funde en la fantasía del paisano Laguna, que criolliza y personaliza la escena. El paisano se representa a sí mismo como Fausto, que firma el pacto con Mefistófeles. La búsqueda de su amada Margarita la realiza Laguna atravesando un escenario infernal donde los demonios, brujas y otros espíritus sublunares diluyen la gravedad que exige la historia, al lucir vestimentas propias de un carnaval de barrio lo que resta impacto trágico a la escena. Los esqueletos son piezas de plásticos montadas en un palo, los diablos y bailarines están disfrazados con trajes sembrados de purpurina, volados y gasas; y los enanos, que pueblan el infierno, están enfundados en trajes de peluche. Como máxima expresión del horror, garronean los talones de Claudio García Satur, a modo de suplicio infernal. A fin de cuentas, el infierno parece un espectáculo barato de kermese, donde el espanto se manifiesta en la mediocridad grotesca del escenario de chasco.
El hermano de Margarita, un joven Gerardo Romano, que interpreta a un militar argentino, sirve de excusa para presentar la Guerra de la Triple Alianza y los cuadros de Cándido López cuando se escenifican las batallas. Alarmado por pastos quemados y otros signos saturninos en torno a su rancho, el capitán le pide a su amigo y futuro cuñado, el gaucho Silveiro (Daniel Fanego) que vele por su hermana. Silveiro le responde que pierda cuidado que son cosas del carnaval, una festividad del diablo. El primer encontronazo entre el doctor Laguna y el capitán se da en el puterío del pueblo, cuando el militar se ofende tras escuchar unos comentarios misóginos por parte del Diablo. Éste enseña su naturaleza trazando un círculo de fuego a su alrededor para salvarse del ataque del capitán que, a su vez, lo exorcisa con la cruz de su sable.
Con ayuda del Diablo, Laguna termina por conquistar a Margarita y arrebatarle su pureza. A partir de esa noche, Margarita no sólo queda impura, sino también preñada y maldita. Las brujas a las que concurre para salvarse, le dicen que nada puede hacer, porque está en manos de Satanás. Una vecina que la había ayudado en el parto, ante la desapareción de la chica, sospecha que Margarita arrojó al niño a un pozo, y luego de denunciarla a la policía, descubren la veracidad de lo dicho.
Laguna, para entonces ya es un ente pervertido y malvado. El cambio es representado grotescamente con un pedido caritativo que le hace un niño. Laguna le entrega una moneda, a cambio de que repase sus botas con la punta de su lengua. Es en el prostíbulo donde Laguna y el Diablo vuelven a encontrarse con el capitán y con Silveiro, cuando ambos regresan de la guerra. Laguna mata a su competidor y luego se trenza en duelo con el capitán, que muere a traición por un certero cuchillazo de Mefistófeles. Ante la agonía de Margarita, Laguna ruega a Dios que la salve y unos ángeles, que parecen fugados de una casa de cotillón, responden al llamado, salvan a Margarita y le devuelven la senectud a Laguna, que también se redime. El relato culmina con los dos paisanos galopando bajo la luz del atardercer. (Mariano Buscaglia) [Cinefania.com]
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